Lo hemos conseguido. Ya tenemos las firmas y compromisos de firma que nos garantizan poder presentar candidaturas de forma sobrada en todas las asambleas de Guipúzcoa de FECOMA. Hemos superado la centena y por ello ya nos da igual cuando se convoquen, porque podremos presentarlas y sobre todo garantizar los votos necesarios para poder garantizar la mayoría amplia de Guipúzcoa en el congreso.
Lo hemos conseguido, además con absoluta discreción. Por lo que sabemos, hoy y aquí es la primera noticia que van a recibir los «otros». Lo hemos conseguido en Julio que es más difícil. Lo hemos conseguido sin recursos económicos y lo mejor es que nos faltan unos cuantos más que estamos seguros que nos van a firmar.
La mala noticia es que parece que me van a echar del sindicato por «incompatible». No podré encabezar las listas pero como sabéis tenemos relevo de sobra. Y mi compromiso es seguir ayudando en todo lo que pueda. Me podrán fusilar si quieren, pero seguiré defendiendo las CCOO y aspirando a recuperar sus mejores tradiciones. YO SOY DE CCOO aunque me echen esos irreverentes e ineptos que están instalados en la poltrona y derechizando el sindicato.
De momento, y salvo nuevas conclusiones que trasladaremos por los canales habituales, seguiremos preparando el próximo congreso. Por cierto, todavía no está tomada la decisión de si asistimos a la reunión del consejo aunque mi opinión, es, como decía el chiste: «que si hay que ir se va, pero ir para na, pues no tiene sentido». Echarme me van a echar por el artículo 33º y las fechas de las asambleas nos vamos a enterar y como las tenemos preparadas, pues sin mas…
Me consta que los estabais esperando, pues aqui lo teneis. Esto fue lo que declaro, el «amigo» Iñaki Merino Secretario General de FECOMA CCOO de Euskadi en el juicio en el que se despedía a Carlos.
Voy a hacer algunos comentarios sobre lo que dice Iñaki:
• El abogado del sindicato le pregunta si tiene poderes o tiene cuentas corrientes del sindicato y dijo que no. La respuesta sincera y cierta de Iñaki debió ser:
«Soy el único pringado que siendo secretario general no tengo poderes, ni cuenta corriente. Porque todos los secretarios generales de región o comunidad autónoma los tienen. Pero como no confían en mi me tienen castigado, pero es posible que hoy y aquí, en este juicio, haga meritos para que me los den»
En todo caso, si el, siendo el secretario general no manejaba cuentas, ni tenía poderes, imagínense el margen que tenía yo. Dijo la verdad pero manipulando el hecho relevante de que él es el único caso en FECOMA ESPAÑA.
• Le pregunta si el cese mío es solo como responsable de fecoma de Guipúzcoa.
Y él dice que “eso es lo que tiene entendido”. Jejeje.
• Luego le insisten en si la comunicación del cese lo he recibido de FECOMA Estatal.
Y él dice “me repite la pregunta”. No era tan difícil pero…
• Le vuelve a preguntar, ¿de quien recibe el cese el demandante?
Y él dice “FECOMA estatal le cesa de sus funciones y luego la ejecutiva de FECOMA EUSKADI decide que otro compañero se encargue porque el cargo del compañero Carlos deja de tener funciones de ser responsable territorial”
Yo me pregunto, pero ¿este hombre sabe lo que dice? Lo que ocurrió es que me dejaban de pagar el sueldo, pero quien me cesa como responsable de Guipúzcoa se supone que es quien me nombro y que yo sepa eso lo hizo la ejecutiva de Euskadi. Son dos cosas diferentes, sueldo por hacer churros (delegados) y participación de la asamblea de majaras que piensa sobre los churros y sus problemas.
• Iñaki se sigue explicando y dice que:
“necesitamos tener un responsable de Guipúzcoa que negocie convenios, atienda a los afiliados puesto que a Carlos le han cesado en sus funciones.”
Sigue metiendo la pata, porque él es el jefe del órgano que me cesa como responsable de Guipúzcoa.
Recordemos lo que ponía en la carta que me enviaron desde Madrid:
El secretariado de la Federación Estatal de Construcción, Madera y Afines de Comisiones Obreras (estatal) decide dar por concluida la relación de sindicalista con dedicación exclusiva que desde el 1 de julio de 2004 ha mantenido con esta Federación Estatal, procediendo con efectos del día 6 de octubre de 2006 a dejar sin efecto la compensación económica y la relación contractual de naturaleza asociativa que para estos casos establece el artículo 45.1 de los Estatutos de FECOMA-CC.OO.
Fecoma Estatal no me cesa como responsable sino que finaliza la (según ellos) relación de sindicalista con dedicación exclusiva dejando sin efecto la “compensación económica” que me abonaban. Lo gracioso de todo esto es que el propio abogado de FECOMA el que insiste en llevarle a este huerto a Iñaki. Todo para demostrar que yo era un “jefazo” del sindicato y que mi relación no era laboral.
• Le pregunta de nuevo, en este caso mi abogado ¿Quién cesa a Carlos?
Y él responde, “a Carlos le cesa quien le contrata, que es la federación estatal”
¿En qué quedamos?, ¿me cesan por un contrato, o me cesan por un cargo? Todas estas respuestas son la que avalaron al juez de primera instancia para afirmar que mi relación tenía dos niveles una de carácter laboral y otra de naturaleza asociativa.
• Le pregunta por mi pertenencia a la ejecutiva, consejo federal y consejo confederal de Euskadi.
Y él responde, “Carlos es miembro de todos esos órganos y seguirá siéndolo, porque ejercerá sus cargos “políticos” no su función de trabajo diario. Porque por ser de esos órganos no es implica cobrar del sindicato, excepto los gastos que se originen, de viaje, etc.”
Iñaki demostró que ser de la ejecutiva no implica ser un liberado del sindicato y que pertenecer a ese órgano de dirección es político no laboral. Nos hizo unos cuantos favores con su declaración, más allá de que evidentemente era testigo de la parte demandada.
Se confirmaba nuestra tesis. Cuando comencé a cobrar del sindicato no era miembro de ningún órgano de dirección. Posteriormente fui elegido. Pero no todos los que cobran del sindicato son de un órgano de dirección. Y sobre todo, dejaba de cobrar y seguía manteniendo mi pertenencia al órgano, por lo que lo que había que dilucidar era de carácter laboral.
• Le preguntan por el organigrama de la federación y el dice:
“cada territorio es libre porque conoce su realidad, alguna vez, pocas, nos reunimos la ejecutiva para hablar del trabajo” “Carlos puede hacer y deshacer dentro de unos cauces normales dentro de la federación y la confederación”.
La pregunta que me hago es ¿sobre qué podía decidir? Por ejemplo ¿podía comprar un mueble para la oficina o un ordenador? No, no se me permitía. ¿Podía aconsejar a un afiliado algo sobre sus problemas? Si, si que podía.
• Le preguntan sobre los cargos y en su respuesta aparte de liarse con el ministerio de asuntos exteriores que todavía me pregunto a que cuento venía dice:
“que eso de los cargos es una gran mentira, porque ese funcionamiento de cargos no existe en nuestra federación”. Detalla el personal que hay en cada territorio para indicar que lo que toca es el trabajo del día a día. Insiste en que “todas las actuaciones del día a día se hacían con toda la autonomía del mundo”
Vuelve a minusvalorar la relevancia de tener un cargo para poner en solfa que la relación es de trabajo aunque con capacidad propia para actuar. Se demuestra que lo que tenía que hacer era trabajar en la actividad sindical. Si hubiera tenido que hacer churros los hubiera hecho, con autonomía para hacerlos, pero haciendo churros en definitiva.
• Le pregunta si yo tenía capacidad para decidir si se firmaba o no un convenio y dice:
“decidimos de forma colegiada (sabrá lo que es colegiada) pero tiene cierta o casi toda la autonomía, casi el 99% de autonomía, siempre que utilice el sentido común y no firme nada por debajo de lo normal”
Finalmente lo que queda claro es que mi opinión era preferente pero no tenía la decisión final, porque me debía a un órgano colectivo, aunque él dice “colegiado”. Por cierto no tiene ni puta idea de ¿qué es colegiado?
Me expulsan del sindicato por el artículo 33º, aunque lo llaman de otra manera «incompatibilidad». Y aunque suene gracioso, es verdad, eso pone en la resolución, que por el articulo 33º de los estatutos soy un tipo incompatible con la pertenencia a la ejecutiva y la afiliación a CCOO.
Bien, si quieren expulsarme que lo hagan, pero no voy a darme de baja voluntariamente. Ciertamente la aplicación de los estatutos implica la incompatibilidad a la que hacen alusión. Sin embargo es una medida que no se ha tomado nunca. Los motivos que tienen para tomar esta medida son otros más torticeros y barriobajeros.
No me sorprende que Iñaki Merino o Rubén Ardiles no tengan valor suficiente para enfrentarse en el próximo congreso con las críticas a su actuación. Sin embargo no alcanzo a entender cuáles son los motivos por los que otros han votado esta resolución. Aunque se hace obvio que necesitan un enemigo para unirse contra él y así despistarse de los problemas que realmente tienen, como por ejemplo ¿en que ha mejorado o crecido FECOMA en Guipúzcoa desde que nos echaron a Jorge y a mí? O ¿porque han tenido que enviar un «vizcaíno-argentino» a Guipúzcoa? O el retroceso de Álava y el estancamiento de Vizcaya. O ¿cómo tener un congreso tranquilito para que salga con «honores» de gran líder el secretario general saliente? y esto vale para FECOMA y para la Confe de Euskadi.
Me sorprende que tengan tiempo suficiente para dedicarse a investigar sobre mi situación personal. Lo gracioso es como manipulan la información, contando solo lo parte que les interesa. Podían haber buscado mis «suntuosas» propiedades y mi suculenta cuenta corriente…
Lo primero, alguien pensaba que después de ser despedido del sindicato por iniciativa de esos que ahora me «incompatibilizan», se habían acabado mis necesidades laborales. ¿Tenía que ganarme la vida? Me he tirado un año estudiando, especialmente en el forem de Donostia, en el que he realizado tres cursos de informática para desempleados (seguridad informática, diseño web y microsistemas) para poder reorientar mi vida laboral.
Segundo había dos alternativas, en mi presente y futuro profesional, una trabajar por cuenta ajena, y dos montarme una salida de autoempleo. Y esto último es lo que he hecho. Es cierto que he creado una empresa, no en la fecha que dicen, sino a principios de diciembre. Me he buscado tres socios que aportasen algo de capital y entre todos hemos puesto un dinerillo para montar una tienda de informática franquiciada. Dos de los socios trabajamos en la empresa. En la resolución de forma torticera, manipuladora y vulgar se dice que soy «accionista», «empresario”, “administrador único», y no dice que soy un cabrón de capitalista y patrón al que hay que colgar de milagro. Reconozco que soy socio de una SL, reconozco que soy el gerente y administrador único de la SL, pero la empresa y esto quiero que conste se ha fundado con 36.000 euros (6 millones de las antiguas pesetas) Y mi porcentaje es del 43% de ese capital, unos 15.500 euros aproximadamente. Vamos, que soy «multimillonario». Ni que fuese socio relevante de Telefónica, ACS o el Banco Santander. He montado una tienda de informática, sin más. No sé si a alguien le parecerá mucho, pero es vergonzoso que eso sea el único camino que han encontrado para echarme del sindicato.
Tercero, se sabe de sobra que en el sindicato hay decenas de autónomos afiliados. En la Federación de construcción hay muchos afiliados que un día eran trabajadores por cuenta ajena, otro eran autónomos (falsos) y otro tenían contratados varios trabajadores y nunca se nos ocurrió echarles del sindicato. Pero conmigo es diferente. Molesto mucho y tengo mucho para contarle a esos afiliados. Y sobre todo hay que rematar la operación de eliminación antes del congreso de CCOO. La mía y la de todos los que me rodean, Ana, Jorge, Oscar, Juanan, los delegados de FECOMA más críticos, etc.
Me consta que muchos afiliados y dirigentes del sindicato son socios de su empresa. Me consta que algunos afiliados y sobre todo dirigentes tienen acciones como inversión. A nadie se le ocurriría hacer incompatible a algunos dirigentes de la actual ejecutiva que tienen acciones y no digo sus nombres para evitar problemas con la ley de protección de datos, pero “haberlos los haylos…” Si el problema es que soy Administrador Único como parece indicar el último texto de la resolución podría dimitir de administrador y fin del problema. Como es tan «grande» mi empresa no tendría ningún efecto. Incluso si quisiera podría pasarme al régimen general, sería legal, aunque un poco más caro. Al amigo Iñaki le daría un mal… y tampoco se trata de joder por joder, como hace él.
Pero en fin, bastante me han jodido en el pasado como para joderme el futuro. A lo más que pueden aspirar ya, es a echarme como afiliado para poder dormir tranquilos. Pues bien, que lo hagan pero como dice el saber popular «arrieritos somos, y en el camino nos encontraremos». Porque esto no ha terminado..
Son unos cobardes. Aunque de momento, para ellos la perra gorda.